Los días pasan de manera vertiginosa y cada vez más, tengo la certera sensación de que la existencia humana puede resultar tan efímera como el sueño de una  noche... 
Me he acostado siendo tan solo una  niña y tras un letargo indeterminado, pero sin duda escaso, he despertado de forma súbita con la disparatada evidencia de encontrarme en  la mitad de mi vida. Poseedora del enorme tesoro que conforman las  miles de vivencias que almacenan mis neuronas, pero que tristemente ya forman parte de un pasado tan extenso como increíble...

La nostalgia siempre presente en estas fechas, pese a que intento ¨normalizar¨ el periodo navideño para no caer en el abismo sin fin de ese sentimiento, pero este año resulta aún más imposible que otros...

No regresaran los que se han marchado y será inevitable la marcha de otros... la pérdida y el dolor forman parte de nuestras vidas, quizá con más frecuencia de lo deseable,  pero por fortuna el sosiego del alma, la alegría y la esperanza también están presentes, aunque a veces solo percibamos lo caótico.... Van llegando de  manera tímida, en moderadas dosis  o en explosiones inesperadas, que nos reconfortan tanto el alma como el corazón y siempre cuando menos lo esperamos...

Un abrazo muy fuerte para todos, en especial para mi tío Alberto y mis primas Sandra y Elena, que están en una fase muy difícil... intentando sobrellevar una pérdida enorme... y es que mi tía Concha era única...

A los habituales del Rincón, os deseo una Nochebuena entrañable y apacible, y que estos días pasen con contenida emoción (al menos la negativa) y la alegría y la ilusión de los más pequeños se viralice entre todos nosotros... 
Con mis mejores deseos...

¨Oh, cuando estoy a la espera de que caiga la nieve, en realidad no parece que fuera del todo, Navidad... Todavía espero que la nieve caiga, no parece que fuese Navidad del todo...¨ 
Coldplay



Berni
24/12/2016
Tal que un día como hoy, solo que hace ya 43 años, nacía mi hermano mellizo y la que escribe estas palabras...
Lo de venir a este mundo acompañado por otro ser minúsculo y semejante a ti es algo mágico y singular y el hecho de compartir todo desde el principio de la vida, sin duda hace que la conexión fraternal sea más especial de "lo normal".
Mis pobres padres se llevaron una buena sorpresa cuando mi madre, tras un encontronazo fortuito con un perro de una vecina, debió tener un subidón de oxitocina y se puso de parto estando de poco más de seis meses. Y fue en semejantes circunstancias y a su llegada al hospital cuando les comunicaron "que traía dos", pues al parecer por aquellos años la ecografía no se realizaba hasta los siete meses de gestación...
Tras nacer eramos tan pequeños e inmaduros que necesitamos estar dos meses ingresados en la Unidad de Neonatología de La Paz, me imagino que pasando momentos delicados (mi madre nos contó que los médicos en un principio no pensaban que mi hermano fuera para adelante), pero después de este tiempo y gracias a los mimos y cuidados de su excepcional personal, cogimos el peso y la vitalidad suficiente como para poder estar en casa. Mis padres comenzaron entonces a vivir intensamente  la maravillosa experiencia de la paternidad... multiplicada por dos!!

Vaya "movidón" tuvo que ser... sin duda una fiesta constante de biberones, picos (que es como se llamaban los pañales de entonces) y vomitonas, porque según decían, yo particularmente  era muy dada a vomitar y en cantidad multiplicada por dos, casi todo lo que ingería. Eso de "echar el doble de lo que entra"es un extraño fenómeno que todos los que tenemos hijos hemos experimentado en mayor o menor medida...
Con ese dato ya podréis vaticinar sin riesgo a equivocaros  que el rollizo  y "requetetieso" de la foto es mi hermano y la canijilla que se encuentra a su lado soy yo.., jeje... qué monos éramos!...

Algún susto que otro volvimos a dar y aunque necesitamos  "empujoncillos" ocasionales y revisiones varias, la verdad es que nos criamos sin grandes problemas gracias a todo el amor y empeño de mis padres, sobre todo de mi madre, que se encargaba de nosotros sin descanso...(madre no hay más que una, desde luego; gracias mami!)

Hermanito, valga esta felicitación de mi parte y esta particular entrada para recordar todo el amor que te tengo y confirmar las dos palabras hace muchos me escribiste bajo el dibujo de un corazón, en el interior de una cajita que aun conservo y me emocionan siempre que las leo: SIEMPRE HERMANOS.



EL DIAMANTE

Cada uno de nosotros posee un destello divino del cual no todos sacamos el máximo provecho. Este destello se parece al diamante, el cual no puede brillar si está enterrado bajo la tierra. Pero en todos nosotros existe una luz como la del diamante. Solamente debemos procurar que brille este diamante, brille con su mejor talla.
Sabiduría jadísica.

(Preciosa reflexión que me han regalado esta mañana)


"Somos como diamantes tomando forma..."
Es la aventura de la vida... siéntela... :) :)




Berni
01/04/2016