Llegó el mediodía y entraron las visitas.
Se acercó con ansiedad hacia a la cama, y buscando nervioso un taburete, se sentó con premura junto a su esposa para tomar vigorosamente su mano inmóvil.
Así lo hacía a diario, como una ceremonia ritual, en un intento de aferrarse a una vida y a un amor que lo habían llenado todo durante veinte años.
Le narraba, lloroso, el devenir de la rutina familiar, que a duras penas continuaba desde que ella se encontraba en aquel sitio, y musitaba, con extrema dulzura, las palabras de amor que quizá nunca necesitó decirla cuando contaba con la vitalidad de la que ahora carecía.
De vez en cuando interrumpía su oración, se acercaba a su oído y la besaba con cuidado, no fuera que los mimos alrededor de los labios desbarataran la sujeción de aquel tubo por donde ahora, según le explicaron, ella respiraba.
Aprovechó la ocasión en que la enfermera hacía unas anotaciones en la gráfica a los pies de la cama. Se dirigió a ella y le dijo:
- Tenéis que salvarla. No sé que voy a hacer si la pasa algo. Es el alma de la casa... y de mi vida, y de todo... por favor os lo pido... la necesito...
Después volvió a situarse junto a su mujer. Continuó susurrándola esas palabras de adoración a modo de rapsodia cicatrizante para los males físicos de ella y los propios de su alma herida.
"Perche cosi sei piu vicina
a illuminar
la vita mia
E l`anima se ne va
verso l`eternita.
L`anima, se ne va..."
Dicen que nada ni nadie somos imprescindibles en esta vida, pero no es cierto.
La ausencia de algunas personas causa un daño irreparable en otras.
Lo podemos vislumbrar en los minutos de visita familiar, ocasión que nos hace más conscientes de la trascendencia de nuestro trabajo.
Y aunque las responsabilidades también pesan, como diría a buen ritmo "La Mari," endorfinada hasta la médula, y pese a los múltiples elementos en contra con los que nos topamos en el día a día, no debemos nunca flaquear ni desistir. Sólo tenemos que ser fugaces transgresores del encuentro familiar, y encontraremos, si alguna vez lo perdemos, el significado de nuestra propia existencia...
(Traducción en comentarios)
Berni.
Domingo 27/3/11.
(Traducción en comentarios)
Berni.
Domingo 27/3/11.