Y siguiendo con eso de la emoción...
Siempre que escucho esta canción de George Michael no puedo evitar experimentar algo parecido a parte de los síntomas que se sufren en el síndrome de Stendhal cuando alguien se expone a una sobre dosis de belleza artística...
Me dan escalofríos, se me eriza el vello, mis ojos se enturbian y siento una inmensa pena, un sentimiento como de inexplicable pérdida.
Es que George, a pesar de su peculiar comportamiento y de su descarada y constante intención de provocar, es mucho George...
Me encanta la sensibilidad de sus letras (este tema casi el que más) y su música.
Siempre que escucho esta canción de George Michael no puedo evitar experimentar algo parecido a parte de los síntomas que se sufren en el síndrome de Stendhal cuando alguien se expone a una sobre dosis de belleza artística...
Me dan escalofríos, se me eriza el vello, mis ojos se enturbian y siento una inmensa pena, un sentimiento como de inexplicable pérdida.
Es que George, a pesar de su peculiar comportamiento y de su descarada y constante intención de provocar, es mucho George...
Me encanta la sensibilidad de sus letras (este tema casi el que más) y su música.
Supe del síndrome de Senthal a través de otro blog, el de un amigo al que también le gusta G. Michael, aunque sus críticas frecuentes sobre las declaraciones y la conducta del cantante me hacen dudar...
En realidad su actitud provocadora e inconformista respecto a muchas cosas que nos rodean (no me refiero a George, sino al blogger) es casi una constante en su vida, cosa que resulta en parte divertida y curiosa, porque en cuanto a la provocación, un personaje como él no necesita "hacerse notar" constantemente, ya es suficientemente especial como para no pasar inadvertido en ninguna circunstancia.
Bueno... es que él, mi amigo blogger, es muy complicado, a pesar de que insiste en llevarme la contraria, y decir que es tan simple como la mayoría de los mortales del género masculino (así se autodefine y así cree que son los hombres... supongo que respecto a las mujeres).
Como amigo, siempre lo quise mucho.
Desprende un magnetismo y posee una simpatía innata que hace que no puedas mas que quererlo...
Pero el lenguaje hace que las cosas sean a veces mucho más difíciles de lo que en realidad son.
O más bien, nuestra torpeza en el manejo de las palabras... que es lo que nos lleva, sin quererlo, a transformarlas en pequeños dardos envenenados, tan mortales como el arma más sofisticada y destructiva...
Pero ya lo decía en algún post reciente:
En tiempo aminora hasta lo más incandescente.J., me alegra que ya no estés "enfurruñado".
Cuando te vea, sonríe por favor. Será el mayor signo de tu indulgencia para conmigo.
Sé que "Penélope" te hace llorar como a un niño. Alguna relación causa efecto que desconozco y ni imagino existirá.
A mí me pasa algo así con éste tema.Espero que te guste (seguro que sí), aunque de él se traduzcan sentimientos intensos en ciertas relaciones entre individuos del mismo género.
Va por ti.
No le des demasiada importancia a las palabras, el 80% de nuestra comunicación es no verbal, y tú moviéndote eres deliciosa, nadie se podría enfadar contigo jamás si en lugar de escucharte, solo te observase.
Me alegro muchísimo de que recoloquéis la situación.
Un beso
Juana, tienes razón en cuanto a tu capacidad de seducción.
Eres absolutamente aduladora, y no negaré que me encanta, a todos nos gusta que nos digan cosas así, a pesar de que seguiré creyendo que lo que dices que percibes de mí, no es más que una subjetividad tuya, que ningún otro ser común ve, porque sencíllamente no existe ( aunque ya sé que tú no eres "común", como lo somos la mayoría...).
Además hay much@s que no se paran a observar lo que tienen alrededor, porque símplemente no les interesa.
Pero estoy contigo en que si lo hicieran, se quedarían sorprendidos y se apenarían que comprobar cuántas cosas maravillosas se han perdido hasta ese momento.
Muchas gracias.
Un besazo.
Yo no soy muy distinta al resto de los mortales, solo he aprendido a ver la vida de otra manera.
Se que nada ni nadie va a cambiar un ápice, lo único que puede cambiar es mi forma de mirar las cosas y a las personas.
Aprendí a aceptar todo y a todos, y a sacar lo mejor de cada situación y de cada persona.
Y como dice nuestro amigo "I love you just the way you are"
Es lo que hay.
Hoy he estado con mi madre y mis hermanos, me encantan estas reuniones de familia, dicen que soy como un rayo, descargo, exploto y perturbo y pongo negro todo lo de alrededor, luego simplemente ..... se acabó, ya no hay más.
Estás equivocada, querida Juana.
Luego sí que hay más.
Lo que explota y perturba después resuena en nuestra mente y en nuestro corazón por siempre jamás.
Es como una reverberación infinita... y es mucho más bello que la NADA.
Gracias por estar ahí.
Y estoy con nuestro amigo...
I love you just the way you are.
Aunque estimo que él nunca me lo dirá a mí.
Es lo que hay :)
Me encanta lo mucho que os queréis, chicas :-)Da gusto "verlo" desde "aquí" donde estoy :-)
Por cierto, yo como también leo a J., me encanta saber que todo se ha recolocado como dice Juana :-)
Besos, chicas
Gracias Charo por estar en todo desde "ahí".
Sé que eres una lectora fiel, pero callada, "en la distancia", por lo que
tu expresividad espontánea hace que valore mucho tu gesto.
En cuanto a la recolocación de las cosas...
El tiempo pone todo en su sitio, como se suele decir, aunque no estemos conformes con la ubicación que se nos dá... y además templa los sentimientos más incandescentes...