Llevaba tiempo dándonos la tabarra con eso de querer un animalejo en casa, a pesar de que yo le decía que con ella ya teníamos bastante...
- Mamá, quiero un perrito.
- No, que al final el perro será para tu madre (y sus cacas, y sus salidas a las seis de la mañana, y los pelos en el sillón...) si lo sé yo...
- Pues un gato!
- Cariño, ya sabes que yo soy muy alérgica a los gatos... imposible.
- Pues un ratón...
- Tu padre casi se muere de asma por los ratones chinos aquellos...
- Pues una tortuga!
- No, que huelen fatal...
- Pues...
- Ya sé, un pez (que ni tuge ni muge, pensé yo). Te vale?
- Sí, sí, un pez!...
Acuario, piedritas, paisaje oceánico de fondo, filtro depurador, comidita, producto para quitarle el cloro al agua... y dos lindos pececitos: 70 eurazos.
Bueno, va...
No me hubiera importado lo anterior, si mi hija les hubiera hecho un poco más de caso, más allá de las dos primeras horas de tenerlos instalados en su cuarto.
Que no se mueren las criaturas de dios porque deben ser más expertas en sobrevivir en condiciones adversas, que el propio Bear Grylls de Cuatro.
"Burbuja" y "Naranjito" les bautizó en cuanto los vio... no se devanó los sesos, la verdad, pero supongo que son nombres apropiados para peces.
Cada tarde, al acercarme al acuario, en cuanto los pobres ven algo de movimiento externo, más allá de su transparente prisión, se lanzan como posesos contra el cristal haciendo ese peculiar movimiento con la boca que todos conocemos, pero de manera absolutamente convulsa.
No sé si me piden comida, o me imploran libertad, pero como lo segundo no es posible por el momento (hasta que me canse de verlos sufrir), me dedico a echarles unas bolitas rojizas que parecen gustarles mucho, y las engullen con avidez al instante en que éstas se posan en la superficie acuosa.
Ellos, muy agradecidos, las devuelven por su parte trasera en forma de minúsculos gusanos rosas, también casi al momento, pero multiplicados por dos (ya he dicho que son muy agradecidos...).
Lo de limpiar su casita... para mi santo queda.
No se hernia tampoco, no os vayáis a pensar, que lo hace cuando el agua pierde su capacidad de transparencia, se torna casi verde, y nos en difícil localizar a Burbuja y Naranjito nadando entre tanta mier...
La historia llegó cuando hubo que irse de vacaciones.
Atención, pregunta:
¿qué c*ño hacemos con los peces?
Mutismo absoluto y cara de "no sé" o "conmigo no va" por parte de los interrogados...
Pues los metimos en una botella de agua mineral de 5 litros, les forramos a bolitas rojas para el camino... y al maletero...
Yo no estaba muy segura de que eso fuera lo más apropiado para ellos, pero no había muchas opciones.
Y mientras los kilómetros pasaban bajo nuestros pies, la tragedia se iba mascando lentamente...
¡Socorro! Soy un pez!... que dirían con horror mi "Burbuja" y mi "Naranjito"...
Muy diferente a la bonita película de animación...
Merece la pena ver los primeros minutos de la película, hasta el inicio de los diálogos.
El tema de presentación me parece precioso...
Berni.
Miércoles 2/9/09.
¿qué ha sido al final de burbuja y naranjito? Yo tengo a Atleti (tortuga) y kum (agapornis),la primera lleva con nosotros mas de trece años y decían que se morían enseguida, el segundo desde navidades pero se le ve con mucha energía. Las vacaciones vienen siendo un pequeño problema que vamos solventando entre abuelos y amigos.Con el paso del tiempo la única que se preocupa por la tortu soy yo, el pájaro parece ser que le ha caído en gracia a mi Santo, pero no sé muy bien hasta cuando. En cuanto a los niños ni que decir tiene que los dos primeros días, sería mucho decir, y de vez en cuando preguntan por ellos. Es lo que hay.
Y bueno tambien decirte que este rincon me parece bastante entretenido y bueno pues tambien se puede aprender algo no?
Besitos.
ah perdona dile a tu santo que mire su correo y os enseñe las fotos.
Si no le han entrado decídmelo. Besitos.
Lille, que hay segunda parte del tema peces, no te inquietes, que ésto va por capítulos, y así me vuelves a visitar ;)
Me alegra que te guste el rincón. Yo aprendo cada día con los comentarios de los habituales y me encanta moverme en la blogosfera (visito a diario otros blogs y hago comentarios con asiduidad).
Creo que el capitán Carioca ha recibido ciertas fotos, pero yo no las he visto aún. Esta noche se las pido sin falta.
Un beso.