La velocidad de caída hizo que una nausea seca constriñera mi estómago de forma súbita, y que un sabor amargo y desagradable llegara repentinamente a mi boca.

Me alegré de no haber comido, ya que con seguridad hubiera vomitado. Y detesto vomitar.
Cada vez que lo hago, parece que la vida se me va en una especie de apnea involuntaria y prolongada... inequívoca sensación ominosa...
Pero por fortuna, en los últimos días apenas comía.
Bueno, a decir verdad, no comía, no dormía... y no lograba centrarme en nada...
Se puede decir que lo único que hacía era en pensar en mi nube azul, de suave tacto y agradable calor, porque el roce terrestre y el gélido invierno se me hacían ya insufribles.
Así pues buscaba el confort del cúmulo níveo de manera constante, sabiendo que aquellos blancos querubines estarían, como siempre, dispuestos a jugar generosamente conmigo.

Pero ahora el sueño celestial se había convertido en una horrible pesadilla de la que no podía escapar, por mucho que intentara abrir los ojos para despertar.
Un ser espeluznante me zafaba por la espalda y me arrastraba sin freno hacia el abismo más profundo.

Como cualquier maniobra de huida sería absurda, dejé de oponer resistencia, cerré los ojos y me dejé llevar, sintiendo en cada metro de descenso una aguda punzada en el pecho, doloroso castigo y adelanto del calvario que mi mente podía presagiar con cegadora claridad...
Miré por última vez los angelicales rostros de la nube celestial. Mis ojos imploraban ayuda... no podía mover los labios, era como si estuviesen cosidos, y mi garganta era incapaz de emitir sonido alguno...

wake me up... wake me up inside...
call my name and save me from the dark...
before I come undone...
save me from the nothing I´ve become...
Bring me to life...





Pero ellos ya no querían tomar mi mano...
Ahora no parecían tan blancos y benevolentes...
El gesto de sus caras había cambiado por completo, algo que mi confundida mente no alcanzaba a comprender... y pude vislumbrar un atisbo de incandescencia en sus miradas...
...maléficas y temibles miradas...

all of this time
I can´t believe I coudn´t see
keep in the dark
but you were in front of me...
whithout a thought, without a voice, without a soul...
there must be something more...


El angustioso viaje terminó con un golpe seco de todo mi cuerpo sobre una superficie pétrea y rugosa.

Debí quedarme sin sentido varias horas...

Después desperté con un terrible zumbido que me taladraba en lo más hondo de los pensamientos.
Era un sonido mucho más que desagradable... verdaderamente insoportable...
En aquel momento, si hubiera podido de alguna manera, me habría cortado la cabeza...

Continuará...

















2 Responses
  1. Juana Says:

    Las historias de este calibre, siempre terminan bien, siempre .....
    Los seres mágicos nunca mueren, ya sabes que es imposible, es "el camino del guerrero" tienes que pasar una cuantas penalidades para descubrir ..... lo que eres realmente .... ¿nos lo vas a decir?¿lo has descubierto ya?


  2. Berni Says:

    Aún no lo puedo contar porque no lo he descubierto todavía, pero estoy en el buen camino, creo...

    Me encanta la foto que has puesto en tu perfil.
    Te va que ni pintado :)
    Un beso.