El momento justo de la intubación es bastante complicado para el individuo que lo va a sufrir, sobre todo si se encuentra suficientemente consciente como para darse cuenta de la gravedad de su estado.
Muchos pacientes piensan que tras la colocación por la boca de ese horrible tubo permanecerán dormidos para siempre y ya no despertarán, apesar de que se les explica que es una técnica segura y necesaria para que una máquina les ayude a respirar un tiempo, mientras se reponen de su grave afección... Pero pocos lo creen realmente, la imagen de la dama negra merodea por su mente dando vueltas , por lo que su angustia es enorme.
Algunos enfermos te cogen la mano y te aprietan con fuerza en un intento de aferrarse a la vida mientras las drogas hacen su efecto y les sumergen en el dulce y profundo sopor.
Es fundamental un toque de humanidad y calor en aquel maremagnum de rápidos movimientos, de órdenes médicas y en el momento en que unas manos y una mascarilla "hermetizan" la vía aérea e impiden que el paciente pueda decir nada más...
Estoy segura de que el pobre quisiera expresar tantas cosas, sus ojos desearían contemplar de nuevo tantos seres queridos que les inundan repentinamente la mente, y sentir el cariño de unos brazos amigos...
No hay como empatizar un poco y pensar que el que está tendido en la cama con tanta gente extraña alrededor pudiera ser uno mismo, para comprender a la perfección que un gesto de cariño y compasión son extremadamente necesarios en semejantes circunstancias.
Sobre todo porque nunca tendremos la certeza de que las cosas salgan realmente tan bien como se esperan, y esos ojos nublados por el miedo tal vez no se vuelvan a abrir nunca más...
Berni.
Lunes 5/4/10.
No me cabe duda, sólo el hecho de cogerles de la mano y escuchar cuáles son sus miedos justifica la grandeza de vuestro trabajo. Hay otras dimensiones que la física pondrá en evidencia más o menos tarde; pero por ahora nos queda la sospecha/certeza de que tocar y escuchar a una persona asustada y vulnerable es un acontecimiento que trasciende el tiempo y el espacio.
Hermosa labor.
Felicidades y mis saludos.
Estoy totalmente de acuerdo contigo: hermosa labor. Es uno de los puntos que hacen que ame mi profesión.
Un saludo querido Javier.
No he leido la entrada, solo el comentario de Javier, pero me atrevo a opinar y a daros la razon en que escuchar a una persona asustada ante un acontecimiento vital os situa en una posicion dificil de olvidar.
Muy difícil, Camino, te lo aseguro...